Acerca de Anna Ungelo

Cuando Anna Ungelo, una joven escritora Finlandesa viviendo en París, visitó Nerja por la primera vez allá por 1957, todavía era un pequeño y tranquilo pueblo de pescadores: ningún hotel, tiendas de recuerdos, supermercados, apenas extranjeros y con un solo coche, el taxi. Anna se enamoró inmediatamente de la singularidad del lugar. Con su esposo Maurice Zalcman alquilaron una habitación en el único bar de ese paseo que luego se haría mundialmente famoso como ‘Balcón de Europa’.
Anna Ungelo (Lahti-Finlandia 1932) es hija del escritor finlandés Yrjö Kokko. Conoció a su marido, un artista francés nacido en Polonia, durante un viaje de estudios a París. La pareja viajaba por la costa andaluza como parte de una gira de recuerdo de Maurice para recordar su dramático viaje como guerrero, durante la Segunda Guerra Mundial, cuando huyó por Málaga para unirse a las fuerzas estadounidenses en África.
Se puede ver más sobre su historia y su arte por esta página.
La joven pareja rápidamente se hizo amiga de las familias locales en Nerja, quienes los adoptaron realmente como uno de los suyos. Anna tuvo el privilegio de tener una visión de la vida íntima de los Nerjeños, detrás de las persianas. Descubrió cómo estas personas aparentemente ordinarias y pacíficas estaban lidiando con el trauma de la guerra civil, solo unos años antes.
A partir de estos encuentros escribió su novela, en finlandés, ‘Pysähtyneet Kellot’, a saber, ‘Los relojes parados’. Las historias tienen lugar en el pueblo imaginario de Alhama y se han cambiado los nombres de las personas.
A partir de ese momento, la familia pasaría todo su tiempo libre, primero en Nerja con sus amigos, y luego en su pequeña casa en la cercana Cantarrijan. Anna conduciría el viaje de 4 días en su coche con los 3 niños, 2 perros andaluces adoptados y, a menudo, invitados, para finalmente llegar a ese lugar donde sintieron que siempre pertenecieron.
Ahora, en su vejez, Anna Ungelo ve en sus sueños los recuerdos de la antigua Nerja. Su libro acaba de ser traducido al español, por fin. Anna quiere presentar a los lectores la Nerja que recuerda, hacer les conocer a la gente que conoció. Quiere que vean, como ella misma se vio, cómo era Nerja una vez, hace mucho tiempo.
Escucha las voces
En su libro la autora habla de la amistad y del amor; ella te lleva de regreso a lugares olvidados.
La próxima vez que visites el Balcón de Europa, cierra los ojos y escucha las voces de Plácido y Antonio, las voces de Paco y Filomena. Escuche la risa feliz de las personas que están muy vivas en el corazón y la mente del autor. Pasear por una Nerja que ya no existe, una Nerja que debemos recordar, conocer a los amigos que no se olvidan. La Nerja que vemos hoy en día tal vez ya no sea la misma, pero en algún lugar su viejo corazón sigue latiendo, está desligado del tiempo. Esa es la vieja Nerja que Anna muestra en su libro: un pequeño pueblo al que ha amado toda su vida, un pueblo donde la vida era tranquila flotando de un día para otro y donde el tiempo parecía desaparecer. Los Relojes Parados.
